Hoy iba a seguir hablando de entrenamientos.
En mi calendario editorial tocaba otro tema bien distinto; iba a contarte alternativas a la bici cuando hace mal tiempo.
Pero he cambiado de opinión.
Porque creo que lo que te voy a contar es todavía más importante.
Si eres ciclista urbana, lo que vas a leer te interesa mucho.
El objetivo de este post es que sepas cómo evitar que te roben la bici.
Porque cada día los amigos de lo ajeno son más espabilados y buscan nuevos trucos para «levantarte» la bici.
[Tweet «Aprende cómo evitar que te roben la bici en la ciudad»]
Hace poco tuve que ir a comisaría a denunciar otro tipo de robo. Y una vez allí, hablando con la agente que me atendió, surgió el tema de las bicicletas. Fue ella quien me facilitó algunas de las pautas que te voy a mostrar en los siguientes párrafos.
Cómo evitar que te roben la bici
#1 Aparca la bici en un lugar transitado
Puede parecer una tontería, pero no deja de ser útil.
Cuanta más gente pase por delante, más complicado es manipular una bicicleta que no es tuya para llevártela.
Y eso siempre «desmotiva» un poco a los cacos.
Así que si quieres evitar que te roben la bici, es un buen comienzo: déjala a la vista, en un sitio por el que pase mucha gente.
No es lo mismo que la dejes en un callejón, donde puede que nadie vea quien se la lleva ni cuando, a que la dejes en una avenida muy transitada.
Puede que aún así lo intenten, pero siempre va a serles más complicado.
Eso sí, trata de no entorpecer la circulación de los viandantes. Se trata de que la vean, no de que la tengan que esquivar.
#2 Elige un buen candado
Candados hay muchos y de muchas calidades.
Y no todos son un obstáculo para los roba-bicis.
De hecho, los candados más utilizados, los de cable en espiral, sirven de poco. Es increíble la facilidad y la rapidez con la que te lo cortan con una cizalla escondida en la manga.
Y ahí se va a quedar tu candado, porque la bici no la vas a volver a ver.
Existen otros muchos candados infinitamente más fiables en el mercado. Es cierto que son más caros, pero desde luego menos que una bici, que es lo que te vas a tener que comprar si la tuya «desaparece».
Candado rígido: Tiene forma de arco, como si de un cepo se tratara. Evidentemente, resulta mucho más complicado de romper y por lo tanto asegura mejor tu bicicleta.
Candado de cuadro: Desde luego son los más cómodos. Se pliegan y se quedan sujetos al cuadro de tu bicicleta. Así es mucho más fácil transportarlos, puesto que van integrados en tu bici.
Desde luego, si quieres evitar que te roben la bici, necesitas un candado de este tipo.
También es importante que candes la bici a una cierta altura (en torno a los 50cm del suelo). Eso complica las maniobras de los ladrones.
#3 No te olvides de las ruedas y el sillín:
El gran negocio de las bicis robadas no consiste en venderlas tal cual.
Lo que hacen es venderlas por piezas en internet, o en el mercado negro.
Por muy bien que hayas candado y asegurado el cuadro, si no tienes en cuenta otros detalles, es posible que cuando vuelvas te encuentres con «media bici».
En el mercado existen tornillos antirrobo. Son tornillos que en lugar de tener cabeza hexagonal (allen), tienen 5 lados. Por lo tanto necesitan una llave específica.
Si pones a tu sillín y tus ruedas este tipo de tornillos, vas a ganar mucho en seguridad. No será tan fácil que encuentres tu bici sin alguna de estas piezas.
Los puedes ver aquí
#4 ¿Puedes demostrar que es tu bici?
Si aún con todo lo anterior, no has podido evitar que te roben la bici, es mucha mala suerte.
No obstante, tendrás que intentar recuperararla.
Para ello, te recomiendo lo siguiente:
- Guarda la factura de compra: Así podrás demostrar que compraste esa bici.
- Identifica tu bicicleta: Hazle algún tipo de señal que aclare que esa es tu bici. Una opción es soldarle una chapa con tu DNI estampado, esconder alguna marca identificativa…
- Siempre siempre siempre, moléstate en denunciar el robo. Es mejor perder un rato en comisaría y poder quedarte tranquila.
- Hazte alguna foto con tu bici: En caso de robo la podrás compartir en redes para que la gente te ayude a localizarla (no será la primera vez que alguien avisa de haberla visto anunciada).
#5 No colabores comprando
Por último, quiero incidir en una cosa muy importante: No colabores.
Siempre he dicho que si hay quien roba es porque hay quien compra lo robado.
No se trata de equiparar el nivel de delito, sino de concienciar.
Desde luego, si no hubiese un mercado de bicicletas robadas, no tendríamos mayor problema.
Por lo tanto, no compres bicis de segunda mano por canales poco fiables. Y ante la duda, solicita algún tipo de garantía (que te muestren la factura, etc.).